Alunizar

Alunizar es una instalación visual y sonora que explora la delicada relación entre la Luna y el agua en la Tierra. El artefacto cimático consiste en una palangana negra llena de agua sobre la que está una caja de luz circular con una imagen luminosa de la Luna llena. En el centro de la imagen, hay una pequeña perforación que alberga una mini cámara de alta resolución que filma el reflejo de la Luna sobre el agua. Esta imagen es proyectada en una pantalla. Bajo la palangana, se encuentra un transductor sonoro , una microcomputadora Raspberry Pi que procesa frecuencias sonoras. Estas frecuencias son transmitidas al transductor, lo que propaga las ondas sonoras en el agua.

Al utilizar las propiedades elásticas del agua y los experimentos de cimática, se puede observar cómo el agua responde a la fuerza física del sonido. La imagen de la Luna llena reflejada en el agua al recibir frecuencias sonoras comienza a vibrar y distorsionarse, cambiando su forma de manera audiorítmica. La combinación de difracción y refracción lleva a la imagen real a transformarse en una abstracción de patrones estéticos producidos por el proceso sonoro. La cámara que filma estos procesos son proyectados por un sistema de visión computarizada, lo que da como resultado una combinación de procesos naturales, electromagnéticos y digitales.

montaje en Cordelia

La cimática es una rama de la acústica que estudia los patrones visibles que se producen en los medios no rígidos, como los líquidos y los gases, cuando se exponen a ondas sonoras. En el caso de la cimática con agua, se trata de una técnica que utiliza agua para demostrar los efectos físicos de las ondas sonoras en un medio no rígido.Las ondas sonoras hacen vibrar la superficie del agua y crean patrones y formas en el agua que pueden ser observados a simple vista. Estos patrones pueden ser muy complejos y hermosos, y su apariencia depende de la frecuencia y amplitud de las ondas sonoras utilizadas.

La Luna y el agua en la Tierra mantienen una estrecha relación que ha sido observada y estudiada desde tiempos inmemoriales. Desde una perspectiva científica, se ha demostrado que la gravedad lunar ejerce una fuerte influencia sobre las mareas, causando la alternancia de las subidas y bajadas del nivel del mar. Además, algunos estudios sugieren que la influencia gravitatoria de la Luna también influye en la formación de nubes y en la circulación de la atmósfera de la Tierra, lo que podría afectar las condiciones climáticas globales. Incluso se ha propuesto que la Luna podría influir en los movimientos de la corteza terrestre, lo que podría tener un efecto en la actividad sísmica y volcánica.

Pero la relación entre la Luna y el agua en la Tierra no es solo científica. Los pueblos originarios de diferentes partes del mundo también han observado y comprendido esta conexión desde tiempos antiguos. Por ejemplo, los mayas de Mesoamérica creían que la Luna era un ser divino que influía en los ciclos de la vida y la muerte. También se dice que los pueblos precolombinos de la región de los Andes en Sudamérica tenían un profundo conocimiento sobre la influencia de la Luna en la agricultura y la pesca.

En la cultura aymara de los Andes, se cree que la Luna es la madre del agua y que sin ella no habría lluvia ni vida en la Tierra. Según esta creencia, la Luna y el agua tienen una conexión espiritual y ancestral que se refleja en la forma en que la lluvia y la humedad se distribuyen en el paisaje.

Desde una perspectiva científica y espiritual, la relación entre la Luna y el agua en la Tierra es fascinante y compleja.

Viktor Schauberger fue un científico y filósofo austríaco que dedicó gran parte de su vida al estudio de la naturaleza y sus procesos. Una de las teorías principales de Schauberger se centraba en el uso de los vórtices en la naturaleza como medio para la generación de energía y la purificación del agua.

Schauberger creía que los vórtices eran una fuerza fundamental en la naturaleza y que eran responsables de la creación y mantenimiento de la vida. También afirmaba que los vórtices podrían ser utilizados para crear flujos de energía limpios y sostenibles, en lugar de depender de los combustibles fósiles.

En relación con la Luna, Schauberger observó que la gravedad lunar afecta a los movimientos del agua y de otros líquidos en la Tierra, creando vórtices y patrones de flujo complejos. Él creía que al comprender estos patrones de flujo, sería posible diseñar sistemas de transporte más eficientes y respetuosos con el medio ambiente.

En particular, Schauberger investigó cómo la energía potencial que se deriva del movimiento gravitacional de la luna llena podría utilizarse para transportar troncos de árboles a través de ríos. Observó que durante la luna llena, la gravedad lunar produce mareas altas que elevan el nivel del agua, lo que a su vez genera vórtices que pueden utilizarse para impulsar los troncos. Esta técnica, conocida como flotación lunar, se utiliza en algunas partes del mundo para transportar madera de forma sostenible.

fue un visionario y un pionero en su campo. Sus teorías sobre el poder de los vórtices y la importancia de trabajar con la naturaleza en lugar de contra ella fueron innovadoras para su época y aún tienen relevancia hoy en día.